TEGUCIGALPA, HONDURAS. La vida de cualquier hondureño lejos de su familia es sumamente complicado, más aún si es fuera de las fronteras.
Nery Yeancarlos Gómez Cruz es migrante hondureño que reside en España desde hace un par de años, luego de buscar refugio por ser un perseguido político. Ha vivido una serie de cambios en su rutina debido a las diferentes tradiciones y costumbres del país ibérico.
Uno de los aspectos que más marca, según Gómez, es pasar las fechas decembrinas lejos de su familia, aún más sabiendo la situación que atraviesa el país por el COVID-19 y los desastres de las tormentas Eta e Iota.
La migración es un mecanismo que muchos hondureños han utilizado para encontrar una mejor calidad de vida. En el caso de Nery, fue por buscar seguridad, pues recibió amenazas luego del fraude electoral de 2017.
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Temporada de Navidad y Año Nuevo lejos de casa
El cambio de dieta es algo difícil que viven los migrantes, pero, Nery comentó que gracias a algunos negocios, como tiendas y restaurantes, ha logrado conseguir alimentos tradicionales de Honduras.
«Varían los precios, ya que los implementos catrachos son más costosos en España, pero en la temporada de Fin de Año, las personas se pueden sentir satisfechas por tener un pedacito de su cultura en la mesa», aseguró el hondureño.
Nery, además, dijo que en España se hacen nacatamales, hay ingreso de lácteos hondureños y otros alimentos muy típicos del país, tal como el pollo chuco.
«Hoy en día, debido a la migración obligatoria, es muy común encontrar compatriotas en distintas regiones españolas. El nombre de Honduras resuena por cualquier rincón y las costumbres son difíciles de perder», aseveró Gómez.
La situación para los hondureños no es fácil en esa nación europea, pues, según Gómez, muchos les cuesta encontrar un trabajo y más aún si no tienen un permiso especial. De esta manera surge la explotación laboral, porque por 15 horas, les están pagando de 30 a 35 euros. Con esa cantidad de dinero, la persona puede subsistir en España, pero muy complicado enviar a sus familiares en Honduras.
Salir del país de forma forzada
Y como Nery tuvo que salir de Honduras por problemas políticos, la situación es todavía más complicada. La adaptación ha sido muy difícil, luego de luchar en su país por la democracia, tuvo que emigrar por cuidar su vida.
«El panorama es triste, porque en ocasiones este tipo de migrantes es marginado y es complicado mostrar la situación que vive Honduras en este entonces», describió. «Así como nosotros, que nos ha tocado un proceso de persecución, ha sido complicado seguir luchando por el país, pero de donde sea, lo seguiremos haciendo, lo fundamental es seguir haciendo bulla por la situación que atraviesa nuestro país”, concluyó.
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